lunes, 11 de marzo de 2013


Crisis mundial y cambio estructural 1929-1945
Este ensayo nace a partir de la lectura del capítulo VI del libro Historia económica de Colombia “crisis mundial y cambio estructural” escrito por José Antonio Ocampo. Es necesario tener en cuenta que durante este periodo se presentan dos hechos que van a determinar la dinámica económica mundial fueron: la depresión de 1929 y la segunda guerra mundial. Estos años de crisis, generaron que los gobiernos liberales mantuvieran el intervencionismo frente a los procesos de industrialización, comercialización internacional, nuevas políticas monetarias  y  fiscales, que posibilitaron reformas de orden social.
Los primeros años de este periodo estuvieron marcados por una crisis frente al precio del café y algunas materias primas que Colombia exportaba, generando menos ingresos para el país y determinando una reducción en el poder de compra de exportaciones. “Los primeros años de la gran depresión estuvieron dominados en Colombia por el colapso del mercado del café y por la brusca interrupción de los flujos de capital.”(Ocampo, 1987, P. 210)
De la misma forma se disminuye una entrada de flujos de capital, establecidos vía venta de bonos del gobierno en la bolsa de New York. Se presentan dificultades para que Colombia pueda adquirir préstamos internacionales que ayuden a financiar el desarrollo y se le agrega que la deuda externa sigue creciendo. “la conjunción de menores ingresos de capitales y mayores pagos por concepto de la deuda adquirida en los años veinte fue desastrosa” (Ocampo, 1987, P. 212). Esto conllevo a que se declara la moratoria sobre el servicio a la deuda, ocasionando que el país solo pagará intereses, más no amortizara la deuda. Con la crisis que se presentaba llego un momento en que el país no pudo cumplir ni con los intereses, con el tiempo los acreedores dan algunas ayudas frente a la reducción de los intereses para que Colombia se comprometiera a pagar.
A raíz de  la decisión de la moratoria sobre el pago de la deuda externa, se desarrolló una reactivación de la economía. “A partir de 1933, la moratoria sobre la deuda externa posibilito una recuperación de las importaciones reales y facilito el proceso de reactivación de la economía” (Ocampo, 1987, P. 214)
Una de las grandes dificultades durante la década de los treinta fue la caída del precio del café, que se presentó por la depresión 1929 y por la sobreproducción que se presentaba en Brasil. “la dificultad más importante era el enorme peso de la sobreproducción de café del Brasil, que alcanzaba una tercera parte de la cosecha anual de dicho país a comienzo de los años treinta, Aunque a partir de 1931 empezó a destruir los excedentes, quemándolos o lanzándolos al mar.” (Ocampo, 1987, P. 215)
Se generan algunos pactos con Brasil buscando mantener el precio del café, pero en 1940 se presenta una gran crisis frente al precio por una disminución de la demanda europea. Esta situación hace que Estados unidos  genere un acuerdo interamericano de café. “el pacto estableció un sistema de cuotas para los países exportadores, garantizado por la participación del principal país consumidor como parte integral del convenio” (Ocampo, 1987, P. 215) con este pacto poco a poco se fue recuperando el precio del café.
Durante los años treinta se presenta una nueva comprensión del intervencionismo del gobierno, es regulador de la vida económica y social. Desde allí aparecen elementos de regulación macroeconómica y  algunos instrumentos que regulan la actividad cafetera.
Uno de los primeros elementos de la regulación macroeconómica es la forma como se conservó una disciplina frente al manejo de la política monetaria. A pesar de los problemas de la recesión económica, de la caída del precio del café, no se tomaron decisiones apresuradas “no debe sorprendernos por ello que ante el primer avatar experimentado por la economía se haya hecho un esfuerzo casi irreal por conservar una disciplina monetaria que amplios sectores dirigentes consideraba como una conquista definitiva del país.” (Ocampo, 1987, P. 219)
La caída de las reservas internacionales, el pago de la deuda externa con las reservas  del banco de la república, género que éste no tuviera para prestar al público, dando como resultado una contracción monetaria. Se dio  también una contracción fiscal porque bajaron los impuestos a las importaciones. Como resultado se presentó una fuerte recesión económica. El gobierno se preocupa por contrarrestarla y toma la decisión de  proteger la agricultura.
A causa de la recesión algunos sectores exigen la creación de políticas anticíclicas. El Gobierno implementa entonces políticas de control de cambio y una reactivación fiscal reforzando los aranceles.
En 1935 se propone una reforma tributaria que busca una reforma agraria y el fortalecimiento del sindicalismo. Esta reforma también buscaba controlar la política monetaria y  fiscal. “la reforma hacia parte de un paquete de estabilización monetaria y fiscal relativamente conservador, que reducía el gasto público y la emisiones del banco de la república y estabilizaba la tasa de cambio” (Ocampo, 1987, P. 222). También se crean mecanismos de crédito a largo plazo para vivienda, agricultura y el fortalecimiento de la industria.
Como última medida macroeconómica se implementó un plan de estabilización que genero un impuesto a las ventas, incremento el impuesto a la renta y estableció una política monetaria de control de entrada de divisas, esta negociación de divisas solo se hacía por intermediación del banco de la república. Por último se implementó un control de precios.
El otro tipo de intervención fue frente a la regulación cafetera, “la peculiaridad de este tipo de intervención fue la importancia que adquirió en su manejo un gremio privado, la federación nacional de cafeteros que adquirió así el doble carácter de instrumento de presión del sector privado y de entidad paraestatal” (Ocampo, 1987, P. 226) existió un impuesto del grano con destino a la federación que financiaba su gestión. La federación se encargó de mejorar las dinámicas de la producción y comercialización del café.
La crisis de 1929 y la dinámica económica, posibilito que se generaran movimientos sindicales que buscaron mejorar las condiciones laborales, movimientos campesinos que posibilitaron una reforma agraria.
Hoy como ayer la situación de los cafeteros se encuentra muy difícil, en un momento en el que tiene movilizado un paro, pidiendo al gobierno los ayude a subsidiar el bajo precio de la carga de café. Se presentan movilizaciones sociales que llevan a pensar, ¿Cómo ayudar a los cafeteros? ¿Cuál es el mejor modelo para generar ayudas? ¿Cómo prepararnos para un mundo más globalizado, donde el precio de los mercados en ocasiones los fija el que tenga el poder de mercado?

A manera de conclusión

REFERENCIA BIBLIOGRAFICA
Melo, Jorge. (1987). Las vicisitudes del modelo liberal 1850-1899. Cuarto capítulo del libro Historia económica de Colombia. Compilado por José Antonio Ocampo. Siglo veintiuno editores. Primera edición. Colombia.
Tirado, Álvaro. (1983). Introducción a la historia económica de Colombia. Decimotercera edición. Ediciones el ancora. Bogotá. Colombia.

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